Delicado relato que rinde homenaje a los elementos esenciales de la vida que siempre han hallado cobijo en sus escritos: al amor, desde la necesidad hasta el sacrificio; a la cultura popular, la tradición, sus raíces y su legado; a la supervivencia, el riesgo, la aventura, el destino, la mujer con todas sus edades y rebeldías; a la madre como pilar del mundo, y a la danza circular, bailada por unas criaturas que José Manuel de la Huerga eleva sobre sus páginas hata convertirlas en legendarias y universales.